A pesar de la rápida evolución de los tokens no fungibles (NFT) durante el último año, las estrategias de colección que tuvieron éxito en 2021 morirán en soledad en 2022 si los proveedores no están un paso por delante del mercado. Existe un enorme mercado NFT por explorar que debe ir más allá del enfoque de coleccionables digitales para integrar una mayor utilidad en los NFT en cada etapa, y, en última instancia, generar más valor para los fanáticos y socios.

En los últimos meses, hemos presenciado un cambio importante en el mercado, alejándose del concepto original de "NFT 1.0" que consideraba los NFT como una versión digital de productos con licencia o PFP, lo que simplemente daba a los fans una forma de demostrar su afinidad por una marca o flexibilizar su propiedad de una edición limitada. Bored Ape Yacht Club (BAYC) abrió camino con una nueva estrategia de establecer la membresía en comunidad como su oferta principal de valor, con el NFT simplemente actuando como una insignia de entrada a una sociedad intrigante con privilegios exclusivos.

Muchas empresas se han sumado al mercado NFT tratando de imitar el enfoque de BAYC al darse cuenta de que la comunidad también es una forma de utilidad y valor. Los resultados han sido impredecibles: cambiantes para algunos proyectos, terribles para otros, sin una receta clara para el éxito repetible. La exclusividad genera demanda para estar dentro de la cuerda de terciopelo, pero si es demasiado exclusiva sin ningún beneficio tangible para los miembros, muchos fans no verán el punto, y el anhelado interés no se materializará.

Hay un enorme potencial para construir sobre la plantilla de BAYC de formas que muchas empresas parecen haber pasado por alto. Si bien la propiedad intelectual original bien diseñada siempre encontrará una audiencia, también hay mucho valor en asociarse con marcas y talentos de clase mundial que ya tienen una base de fans ultra comprometida. Eso minimiza los riesgos y costos asociados con intentar crear entusiasmo en torno a una propiedad desconocida, siempre y cuando la colección en sí sea algo que los fans consideren auténtico para la marca y su fanatismo.

Si la marca subyacente tiene un fuerte elemento de creación de mundo y continuidad, los NFT que ofrecen episodios canónicos inéditos que involucran a personajes, escenarios y eventos del universo de la historia van directo al corazón del atractivo de esas propiedades. Como industria, debemos buscar formas de permitir que los fans usen los NFT para crear sus propias experiencias en el mundo o amplíen la propiedad intelectual como fanfiction digital tokenizado. Para propiedades que usan eventos del mundo real para activar a los fans, como paneles en Comic-Con, reuniones con celebridades o experiencias emergentes, los NFT pueden otorgar acceso a privilegios VIP con un valor significativo en la vida real.

Respecto al metaverso, sea cual sea su forma final, marcar territorio en un mundo virtual o construir una cueva de fanáticos digitales para flexibilizar tus colecciones no te llevará muy lejos. Los fans querrán reunir esas membresías de comunidad, experiencias e historias en un espacio compartido. Vincular esas experiencias a los NFT les dará a los fans más razones para coleccionar, poseer, comerciar y crear conjuntos completos que aumenten de valor a largo plazo.

"NFT 1.0" se construyó sobre el FOMO (miedo a perderse algo), la escasez y la apreciación de precios. "NFT 2.0" se centrará en la utilidad, el valor, la innovación y la narración. Si los proveedores y socios de NFT mantienen la experiencia del cliente en el centro de sus estrategias, parece haber un futuro brillante para el mercado en general.